¿Sabes qué es la tasa de conversión de una web? ¿Te gustaría mejorarla? A continuación te contamos exactamente qué es la «tasa de conversión» y 20 ideas que te darán las claves para mejorar tu web y conseguir más clientes para tu negocio.
La tasa de conversión es el proceso por el cual nuestros visitantes hacen lo que queremos que haga. O sea, se convierten en clientes, o contestan una acción de marketing determinada, o compran un producto, o contratan un servicio, o llegan a un determinado punto del site.
La tasa de conversión se calcula dividiendo: número de conversiones totales / número de visitas totales. La definición de conversión dependerá de cada web: una descarga, una petición de presupuesto, un registro, suscripción a una newsletter, contacto mediante formulario, compra de un producto, etc
Cuando una empresa quiere mejorar el ROI (Conversion Rate Optimization (CRO) de su presencia en Internet, trabajar la optimización de conversiones es el método más efectivo para aumentar el retorno.
Antes de plantearse cualquier cambio, analiza las cifras actuales de tu web. Mira los datos de Google Analytics y responde a estas preguntas: ¿Cuáles son las páginas que más tráfico atraen? ¿Cuáles son las principales páginas de salida? ¿Cuáles las que más convierten? ¿Qué elementos tienen las páginas con mejor rendimiento y qué podemos trasladar de estas a las que funcionan peor?
Una vez que hayas extraído conclusiones podrás realizar cambios, siempre de forma gradual y midiendo su efectividad.
Tu visitante debe tener siempre la información más relevante a la vista. Evita que tenga que navegar e investigar por tu web para encontrar lo que está buscando. Utiliza la homepage como reclamo de tu principal servicio y evita sobrecargarla de información secundaria.
En relación al anterior punto, es importante que coloques en un lugar visible tu teléfono, un formulario de contacto, una llamada a la acción o tu página de compras, en función de tu objetivo.
Diseña páginas de aterrizaje específicas que contengan llamadas a la acción claras, testimonios y beneficios. Elimina cualquier posible distracción de la landing page: todos los elementos de esta página deben estar enfocados a un único objetivo.
Elimina pasos innecesarios en el proceso de compra y evita pedir más datos de los imprescindibles en los formularios. Si tu usuario se ha decidido a comprar o a registrarse en su web, no le distraigas ni le hagas dedicar más tiempo del necesario.
No dejes que el usuario salga de tu web para buscar información y comentarios del producto que desea comprar. Permite que otros usuarios dejen sus comentarios y opiniones, esto facilitará el proceso de decisión en la compra.
Para algunas webs, como las páginas webs de profesionales son importantes los comentarios testimoniales de anteriores clientes que recomienden sus servicios. Puedes añadir las historias de clientes, casos de estudio o logos reconocibles de las marcas que hayan trabajado contigo. Otra forma es añadir mediante un widget las reseñas de Facebook y Google+, o las recomendaciones de Linkedin.
Tu cliente quiere saber quién eres y si puede confiar en ti para su compra. Por eso es importante incluir en la web datos de la empresa y su perfil (historia, experiencia, equipo, reconocimientos…).
Es probable que un posible comprador quiera saber qué garantias le ofrece el producto o servicio, qué ocurre si no está satisfecho, a quién puede recurrir si algo no marcha cómo se esperaba… Construye una sección de ayuda o de preguntas frecuentes para que tu posible cliente comprenda que puede confiar en ti.
También puedes utilizar el servicio de chat como soporte a la hora de comprar.
Realiza pruebas A/B para conocer cuáles son las que mejor resultados dan. Si estás dirigiendo tu tráfico a una landing que no convierte, puedes hacer diferentes pruebas como los test AB con pequeñas variaciones para ver qué funciona mejor.
Una herramienta para esto es Optimizely, que es muy sencilla de manejar y tiene mucho potencial. También hay otras como Unbounce o Instapage. Elige con la que te sientas más cómodo.
La optimización de la tasa de conversión no es un objetivo final en sí, sino que es un proceso continuo de pruebas y cambios. Ya sabes que a medida que pasan los días van cambiando las necesidades de los clientes, por lo que nunca debes dejar de analizar los datos y tener en cuenta tu embudo de conversión. En cualquier momento, se puede formar otro nuevo cuello de botella.
– 10 cosas que puedes hacer por tu web antes de que acabe el verano
– Las 20 tácticas más importantes del Inbound Marketing
Las extensiones de Google Chrome son una herramienta muy útil para personalizar nuestra experiencia de…
ChatGPT ha llegado para quedarse y aunque la herramienta de IA (inteligencia artificial) aún tiene…
Tanto si tienes un negocio físico como online, necesitas aprender a posicionarte en Internet y…
Si utilizas Google Analytics para medir el tráfico de tu web, necesitas pasar a Google…
ChatGPT es un chat de inteligencia artificial que se puede integrar en múltiples plataformas…
El escritorio virtual es un sistema informático que no se ejecuta en el ordenador, PC,…