La llegada del cloud computing o nube ha supuesto, sin lugar a dudas, una serie de innumerables ventajas para todos los usuarios. A la facilidad de acceso a los programas y documentos se añade la osibilidad de ahorrar espacio en el disco duro, ahora que ya no hay que instalar según qué programas.
Pero, del mismo modo que el vídeo mató a la estrella de la radio, ¿acabará la nube con la instalación de programas? No con todos, pero seguramente sí con algunos. He aquí varios ejemplos:
1.- Editores de texto.
En el mejor de los casos, un completo editor de texto ocupa unos 200MB en tu disco duro y una serie de recursos dentro de la RAM. ¿Seguro que necesitas ocupar ese espacio y esa memoria, ahora que existen Google Docs y otros editores en la nube?
2.- Reproductores de vídeo.
¿Quién necesita reproductores de vídeo si las descargas están en desuso? El futuro más inmediato del consumo de contenidos pasa por el streaming. Aunque no suelen ocupar mucho espacio, ¿de verdad vas a necesitar un reproductor alojado en tu ordenador?
3.- Editores de fotografía.
Si quieres instalar Photoshop en tu equipo, prepara unos 500MB y varios recursos de tu memoria RAM. Pero, a menos que seas un usuario muy pero que muy especializado y te dediques a la fotografía como profesión, ¿no tendrás de sobra con otras alternativas que te ofrece la nube? Aquí tienes siete.
4.- Editores de vídeo.
Algo parecido a lo que pasa con el Photoshop. YouTube acaba de actualizar y mejorar su editor de vídeo, incorporando herramientas que hasta hace poco parecían imposibles en una plataforma online. Si eres editor profesional, nos callamos, pero en caso de que seas un usuario medio, ¿de verdad necesitas ocupar 1GB de tu disco duro con un editor de vídeo de los de toda la vida?