Ya sabemos de sobra que el tabaco perjudica la salud, tanto de quienes fuman como de los que están a su alrededor. No en vano se cierne sobre nosotros la legislación impulsada por el Ministerio de Sanidad en esta materia. Y lo que queda por venir… en pocos meses se prohibirá fumar en bares y restaurantes… con o sin zona para fumadores.
La cuestión es que ahora también comienza a afectar a la salud de nuestros ordenadores. En Estados Unidos algunas tiendas oficiales de Apple se están negando a reparar los equipos por contener sustancias tóxicas, provenientes del humo del tabaco.
De momento sólo ha pasado, que se conozca, con los fumadores estadounidenses propietarios de un Mac. Pero el caso es que a largo plazo el hábito de fumar influirá en la vida útil de sus equipos, pues para cualquier arreglo o puesta a punto, no podrán hacerlo en las tiendas oficiales de Apple. Y eso implica hacerlo uno mismo, o buscarse un amiguete o alguna tienda no oficial.
Así, si el gigante de Cupertino rechaza reparar aquellos ordenadores que han estado en contacto con humo de tabaco. El motivo es que las minúsculas partículas del humo (que impregnan todo lo que hay a su alrededor) contienen sustancias tóxicas a las que la empresa no quiere exponer a sus trabajadores. Por lo visto el contacto directo con ellas es tan peligroso como ser fumador pasivo. Así, al menos, lo han confirmado varios lectores al portal estadounidense Consumerist.
«Me informaron de que su ordenador no podía ser reparado porque estaba continado», en la cola de reparación le rechazaron el equipo de un estudiante universitario fumador, aún a pesar de contar con una garantía bastante extensa (y cara).
Los afectados han examinado la garantía del producto y en ningún momento se menciona el humo de tabaco como elemento que podría impedir la reparación del mismo. Así que probablemente este tema traerá cola. Es de suponer que, conociendo el espíritu americano, demanden a Apple y a partir de ahí comience a advertirse en las garantías de los equipos… ¿qué te parece?